domingo, 28 de junio de 2015

McLeod Ganj y el Dalái Lama

Nos encontramos en McLeod Ganj, ciudad donde reside su santidad el 14º Dalái Lama y se halla la sede del Gobierno tibetano en el exilio. Alberga una importante comunidad tibetana, en su mayoría de refugiados, por lo que se ven muchas túnicas de color granate y más ahora que el Dalái Lama se encuentra en su residencia y a vísperas de su 80 cumpleaños.



En 1960, el Dalái Lama pidió asilo aquí tras la invasión china del Tíbet. Desde entonces, McLeod se ha convertido en un importante centro para el estudio del budismo y la cultura tibetana. Muchos viajeros vienen para trabajar como voluntarios en proyectos sociales centrados en los refugiados.




Sus grandes montañas y el Himalaya nos llenan de paz, este pueblo se caracteriza por tener tiendas de cuencos tibetanos, campanas, piedras, pashminas y muchas más. Es como estar en otra faceta de India, es un color de la gran gama que contiene este maravilloso país.


Los rasgos asiáticos, la nobleza, pureza, sencillez y humildad se ven reflejados en cada esquina. Se respira aire fresco, creando el ambiente propicio para estar unos días rodeados de naturaleza.


Salimos a tomar el café del día en el TCV VILLAGE CAFÉ y los monos nos hicieron compañía, así que una vez más Urtzi tuvo que hacer de tripas corazón, respirar profundo y esperar que se fueran tranquilamente.

 

De allí nos fuimos a conocer el principal centro de peregrinos, monjes y turistas, lleva por nombre Tsuglagkhang, comprende la residencia oficial del Dalái Lama (el photang), el Namgyal Gompa, el Museo del Tíbet y el propio Tsuglagkhang complejo para los exiliados dedicado a la diosa tibetana de la compasión.





Pudimos observar en el Namgyal Gompa como los monjes debatían, es parte de la enseñanza, suponemos que para lograr mantener la calma, puesto que uno estaba de pie y le gritaba al que tenía frente a él sentado.

 

Disfrutamos de las maravillosas vistas del pueblo y volvimos al centro para comer, elegimos comida italiana y fue lo mejor!


Recomendamos con los ojos cerrados Jimmy´s Restaurant, la mejor pasta que hemos probado en meses. Con la barriga llena y el corazón contento nos fuimos a conocer los alrededores del centro, después al hotel para hacer un poco de yoga y continuar con el reto de los 100 días de esta disciplina.


Una vez que terminamos salimos a cenar y que mejor que momos rellenos de espinacas con queso y Thukpa en el Norling Restaurant, exquisitos platos tibetanos, creo que recuperaremos peso en esta ciudad…

 

DATOS ECONÓMICOS

Entrada al Tsuglagkhang Gratuita.


RECOMENDACIONES

Si deseas hacer voluntariado o practicar yoga, puedes colaborar o asistir al TIBET WORLD. Jogiwara Rd (Opp. Rogpa Café) McLeod Ganj, Daramsala.

 

Para comer nada mejor que el Jimmy´s Italian Kitchen después de un largo viaje.1rst Floor, Jogiwara Road McLeod Ganj


Ricos y económicos sándwich de queso en el TCV VILLAGE CAFÉ



Rafa
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miércoles, 24 de junio de 2015

De Uttarakhand a Himachal Pradesh

Diez días en Rishikesh se terminaron pasando más rápido de lo que parecía en un primer momento. Tras vivir esta enriquecedora experiencia llegó la hora de desplazarnos a otro sitio para continuar con nuestro viaje tanto externo como interno, así que tomamos la decisión de ir a Himachal Pradesh, otro estado de la India que, como su nombre indica sigue abarcando parte de las montañas del Himalaya.

Con su collar bien hermosa ella.
Nos despedimos de Ramesh en el ashram a eso de las 11:30 de la mañana y como teníamos que hacer tiempo hasta las 4:30pm, comimos en uno de nuestros lugares favoritos, el restaurante Jai Guru Dev, que tiene aire acondicionado y wifi. Después fuimos al Café Coffee Day, también con aire acondicionado, situado más cerca de la zona de vikrams y tuc-tucs al otro lado de Ram Jhula.

Soja deshidratada con patatas y SIN PICANTE!!


Cuando finalmente llegamos al lugar de donde salía nuestro autobús, nos encontramos ante un grupo de extranjeros, viajeros como nosotros, bajo una lona de plástico a modo de cabaña que los protegía del sol. Hasta el momento que nos indicaron que podíamos montar en el bus, nos acomodamos allí como pudimos, ya que no era muy grande.

El fantástico bus que no tenia aire acondicionado tenia una decoración absurda, ya que cada dos asientos había un ventilador que te daba esperanzas de un poco de sosiego, pero no, sólo estaba de adorno, aunque el viento que entraba por las ventanas calmaba la sensación de sauna.

El autobús fue parando cada poco rato a recoger a viajeros locales, sobre todo de rasgos tibetanos y nepalíes. Hubo un percance con un par de viajeros que se subieron durante la noche por que querían sentarse en unos asientos que ya estaban ocupados. Resulta que la numeración de los asientos estaba mal indicada y a los viajeros que montamos en Rishikesh nos asignaron asientos que no eran los que nos correspondían con los que teníamos en nuestros billetes. Finalmente todo se resolvió cuando una chica occidental decidió cambiar de asiento para que se tranquilizase la situación, pero aún con eso los pasajeros no estaban conforme y se pasaron un buen rato haciendo llamadas a la agencia de viajes y hablando con el ayudante del conductor.


Tras una parada para cenar yo caí en sueño profundo y aunque Rafa no tuvo la misma suerte, llegamos con el fresco de la mañana a McLeod Ganj. Nos costó un poco encontrar una nueva casa que se ajustase a lo que buscábamos, pero finalmente dimos con el sitio acertado, Victoria HOUSE.


Ese mismo día no hicimos mucho más, el viajecito de 15 horas aproximadamente nos dejó tan agotados que dormimos hasta que el hambre pudo más que el sueño. Fuimos a comer, conocimos un poco las calles donde se encuentra la mayor actividad comercial junto con sus restaurantes, sobre todo disfrutamos del clima fresco de la montaña, la comida tibetana y de la que no era tan tibetana también.

También hay monos, cuidado!!

DATOS ECONÓMICOS

Vikram desde Ram Jhula hasta la estación de buses, 80INR la carrera.

Autobus desde Rishikesh hasta McLeod Ganj 1.000INR/Persona. (15h)


Victoria HOUSE, nuestra casa, con wifi, agua caliente, balcón con vistas a las montañas, zona tipo cocina con fregadero, baño propio y manta, 350INR/noche, la habitación doble.



Urtzi

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martes, 23 de junio de 2015

Rishikesh y los Beatles

Rishikesh hace casi 50 años fue sede de las estrellas del pop más famosas del mundo, yendo allí por un camino de despertar espiritual que transformó su música para siempre. Aquí las palabras claves son yoga y meditación.


A través de los años se ha convertido en todo un imán turístico y es la quinta esencia de la new age según algunos, debido a la cantidad de actividades que se practican ligadas a ésta, como tocar el sitar o la tabla, probar el yoga, practicar la meditación mientras se toca un gong, experimentar la cristaloterapia y cualquier tipo de masaje que pueda imaginarse, salmodiar mantras y beber un té ayurvédico acompañado de comida vegetariana.



En Febrero de 1968 esta ciudad ocupó los titulares mundiales cuando los Beatles y sus parejas se alojaron en el ashram de Maharishi Manesh Yogi en el Swarg Ashram, tras la visita de George Harrison. Ringo y su esposa, nada vegetarianos y con gran añoranza de sus hijos, se marcharon a las dos semanas, pero los demás se quedaron hasta dos meses.






Ahora el ashram se encuentra totalmente abandonado cerca de las estribaciones de la cordillera del Himalaya, se ha convertido en un santuario de un tipo diferente después de que los fans de los Fab Four pintaron las paredes con algunos de sus más icónicas letras.




Nosotros a pesar de saber que hoy por hoy éste se encuentra cerrado porque está en zona de protección oficial, nos aventuramos, fue abandonado en 1997 y ahora vuelve a estar a cargo del Departamento Forestal, supuestamente vigilado para que turistas y locales no accedan a las instalaciones, los de seguridad se dedican a cobrar entrada que se puede regatear, puesto que no es nada oficial. Algo que agradecemos, porque de otro modo no lo hubiese conocido.


Subiendo la pequeña cuesta que da la bienvenida al lugar comencé a sentir debilidad en mi cuerpo, debido al amor incondicional que me había mostrado el váter esa mañana. Así que bajamos el ritmo que ya de por sí era casi nulo.

De camino a las instalaciones se podían ver las pequeñas cabañas que tenían una especie de cúpula donde las personas solían pasar horas meditando cuando el ashram se encontraba operativo.

Al pasar la puerta principal coincidimos con un sadhu que nos indicó cual había sido la cabaña donde había meditado Jhon Lenon en su paso por esas tierras, bastante curiosa, aunque con tanta naturaleza no nos atrevimos a entrar.


Continuamos el recorrido entre una exuberante vegetación y monos hacia la capilla donde los visitantes han decorado las paredes con obras de arte confusas, así como la letra de sus canciones favoritas de los Beatles.




Después de recorrer los diferentes espacios volvimos para comer y seguir disfrutando de los atardeceres que nos regalaba el Ganges.



Aquí os dejamos enlaces en el caso de que tengáis más curiosidad acerca del paso de los Beatles por esta ciudad.

Rafa
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lunes, 22 de junio de 2015

Parmarth Niketam Ashram



Tercer día viviendo en el ashram, nos levantamos para asistir al yoga matutino, la clase empezó a las 6:30 como era habitual. Después de la misma Niklas se despidió para continuar con su viaje y nosotros nos quedamos descansando un poco. Tras el desayuno cambiamos de habitación a una doble y conocimos a Ramesh, Ramón para los hispanohablantes, que es uno de los hombres que se encarga de la organización y reservas del Parmarth Niketam Ashram. Hablaba perfecto español ya que había vivido unos 35 años en España, así que pudimos conocer un poco más sobre el lugar. Muy amablemente me acompaño hasta la nueva habitación y además nos regaló dos copias de un libro traducido al español escrito por líder espiritual del ashram su santidad Pujya Swami Chindanand Saraswaiji (un nombre "facilísimo").

Pujya Swami Chindanand Saraswaiji


La vida dentro del ashram en Rishikesh se volvió muy tranquila según iban pasando los días y el tiempo tomó otra dimensión. Si eres capaz de tener algo de disciplina, puedes encontrar fácilmente la sensación de paz y calma. No es que sea fácil por estar en India al lado del Ganges o en un ashram con maestro espiritual, aquí todo depende del enfoque con el que quieras tomarte las cosas, ya que si sólo ves lo negativo como la cantidad de vacas que hay por las calles haciendo sus necesidades en cualquier lado o la cantidad de moscas que vuelan por las cacas, sabiendo que estas pueden terminar en las cocinas, posándose sobre tu comida o las personas pidiendo en cualquier esquina, junto con un calor insoportable, difícilmente encontrarás el equilibrio que prometen la meditación y el yoga.


Sobre todo lo difícil es centrarse en uno mismo, estamos tan acostumbrados a recibir grandes cantidades de estímulos externos y practicar algo tan sencillo como enfocarse en la respiración o hacer pocas cosas a lo largo del día y simplemente pasar el tiempo observando, puede resultar bastante complejo. Quiero decir con esto que para centrarse en uno mismo hace falta dedicarle tiempo y al sentir que en ese tiempo no hacemos nada productivo, sino que perdemos las horas del día, entramos en conflicto. En cualquier caso, aunque no sean agradables estas vivencias, podemos utilizarlas como una prueba para conocer nuestro nivel de tolerancia, aceptación y adaptación, lo que viene siendo el auto-control.


Os cuento todo esto por que otra vez más el malestar físico, a través de visitas constantes al baño, apareció inesperadamente y tanto Rafa como yo nos pusimos enfermos. Rafa tardó menos tiempo en recuperarse que yo e incluso una tarde tuve algo de fiebre. Por suerte empezamos a poner remedio rápidamente y no dejamos que el malestar llegara apoderarse de la situación, más bien nos encaminó a estar más centrados.

Amor a primera vista XD
Vivir los rituales en las orillas del Ganges, contemplar a los sadhus que se reúnen para ver el atardecer, oler el incienso y escuchar la música espiritual que suena por la calle te hacen descubrir nuevas sensaciones, sobre todo cuando tienes tiempo para estar en este entorno varios días.



Urtzi

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